Los intervalos de carrera son una técnica de entrenamiento que consiste en alternar períodos de carrera rápida con períodos de carrera más lenta o de recuperación.
Esta técnica te ayuda a mejorar la resistencia, la velocidad y la capacidad cardiovascular, y la utilizan tanto atletas profesionales como corredores de fin de semana.
Los intervalos de carrera pueden variar en tiempo, distancia y esfuerzo.
Ejemplos de intervalos de carrera
• Intervalos de alta intensidad:
alternar entre carreras rápidas y carreras más lentas o de recuperación. Estos intervalos son ideales para mejorar la velocidad y la capacidad cardiovascular.
• Series:
carreras rápidas de una distancia específica (como 400 metros) seguidas de un período de recuperación. Estos intervalos son ideales para mejorar la resistencia y la velocidad.
• Fartlek:
carreras rápidas intercaladas con carreras más lentas en un patrón no estructurado. Estos intervalos son ideales para mejorar la capacidad cardiovascular y la resistencia.
Recomendación importante:
Es importante mencionar que es recomendable empezar con intervalos cortos y con una intensidad moderada, y a medida que tu capacidad aumenta, puedes aumentar la duración y la intensidad de los intervalos. Siempre es importante escuchar a tu cuerpo y no sobreestimarte. También es recomendable combinar los intervalos de carrera con entrenamiento de fuerza y estiramientos para prevenir lesiones.
Además, los intervalos de carrera son una excelente manera de romper la monotonía del entrenamiento y mantenerse motivado. Pueden ser realizados en una pista de atletismo, en un parque o en cualquier lugar donde haya un espacio suficiente para correr.
En resumen, los intervalos de carrera son una técnica de entrenamiento eficaz para mejorar la resistencia, la velocidad y la capacidad cardiovascular. Son una excelente manera de romper la monotonía del entrenamiento y mantenerse motivado. Es importante recordar comenzar con intervalos cortos y con una intensidad moderada, y a medida que tu capacidad aumenta, aumentar la duración y la intensidad de los intervalos. Siempre es importante escuchar a tu cuerpo y no sobreestimarte.