Para mejorar nuestras marcas personales requiere sacrificio, disciplina, y tener que acostumbrarnos al “dolor” como parte protagonista en partes de la carrera donde nuestro cuerpo nos da señales que no da más.
Debemos aclarar que este “dolor” no significa aguantar molestias que implique lesionarnos, sino más bien ser capaces mentalmente de aguantar las señales que nos transmite el cuerpo de cansancio.
En esta nota te daremos algunos tips y entrenamientos que te ayudarán a reforzar tu tolerancia al dolor en cualquier carrera.
Técnica de visualizar la carrera:
El “dolor” generalmente se produce los últimos tramos de la carrera por el agotamiento mental y corporal, una manera de bajar esta sensación de “dolor” es la técnica de visualizar el objetivo final (la meta) como casi sentir que estamos ya ahí, es una muy buena manera de que la distancia se te haga más corta y la mente se alivie.
Intenta antes recorrer la zona de la meta para conocerla, y piensa cuando vayas corriendo la cantidad de veces que has llegado a una meta, y todo lo que entrenaste para lograr este objetivo.
Todos estos pensamientos “positivos” te harán recordar que “si puedes”, y es cosa de seguir tu plan.
Manejar situaciones inesperadas con “la disociación”:
El dolor muchas veces viene en una carrera en el momento menos inesperado, como por ejemplo al aparecer alguna molestia muscular. El corredor mentalmente fuerte a la tolerancia a dolores es también flexible a estos cambios que se vayan produciendo en una carrera, y son capaces de bloquear este sentimiento y seguir con el plan según las circunstancias.
“La disociación” consiste en pensar en algo positivo en esos momentos para distraerse, esta estrategia contribuye a aumentar la tolerancia al dolor y el rendimiento deportivo porque reducen el estrés fisiológico generado por estos cambios inesperados.
Entrenar a ritmo de carrera:
Si entrenas a la velocidad que quieres correr el día de la carrera unas dos veces por semana las últimas 4 semanas. Lograras que tu cuerpo tenga una tolerancia al dolor tremenda, ya que mentalmente y físicamente reconoce ese ritmo y sabe manejarlo.
Si vas a correr 21k o 42k has entrenamientos entorno a 10k a ritmo de carrera, y para distancias menores en la misma escala.
Entrenamiento de intervalos con baja recuperación:
Entrenamientos de velocidad es otra gran herramienta para mejorar la tolerancia al dolor. Los repeticiones como 10×400, 6×800 con una recuperación corta de 1 minuto es una muy buena técnica de ejercicio.
Este entrenamiento puedes hacerlo una o dos veces por semana, pero dejando un día de descanso o de entrenamiento lento al otro día para recuperarte y asimilarlo.