Cómo correr sin cansarse: Los 3 grandes secretos
A todos los runners nos ha pasado alguna vez que hay un momento en que el sufrimiento supera a nuestra mente, no dejándonos mantener firme nuestro ritmo de carrera y hasta abandonar.
Este bajón es muy normal sentirlo y produce sentimientos de fracaso, angustia, rabia… y nos hace preguntarnos en qué fallamos para no haber aguantado correr a un ritmo al que sí sabíamos que estábamos preparados.